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  Jerbo 27-04-2025 05:17 (UTC)
   
 




Los dipodinos (Dipodinae) son una subfamilia de roedores  miomorfos de la familia Dipodidae conocidos vulgarmente como jerbos (del árabe يربوع yarbū' o hebreo ירבוע yarbōa' ). Son roedores saltadores que viven en la zona septentrional de África y Asia. No deben confundirse con los gerbilinos (como Meriones unguiculatus), que pertenecen a la familia Muridae.

Existen 9 especies diferentes de jerbos, distribuidas en 5 géneros, el más común y utilizado como mascota en diversos países es el jerbo de Egipto (Jaculus jaculus). A diferencia de los gerbilinos que existen 16 géneros, y mas de 110 especies diferentes.

Generalmente el jerbo suele confundirse, por lo parecido de sus nombres, con el gerbillo, pero se trata de especies muy diferentes, de familias distintas, y que lo único que comparten es que pertenecen al mismo orden de los Roedores. No existe una especie única llamada jerbo, pero generalmente al Jaculus jaculus se le conoce como jerbo, debido a que es el más cotizado como mascota en países como Estados Unidos, Canadá y también en Europa.

Caracteristicas:

Mientras que los hámsters duermen durante el día y tienen hábitos nocturnos, los jerbos alternan períodos de sueño y actividad. Esto te permite interactuar con ellos tanto si tus horarios son diurnos como nocturnos.

Los Jerbos son sumamente curiosos y sociables, son muy dóciles y gustan de la compañía de los humanos si han sido acostumbrados a ello desde bebés. Los hámsters son solitarios, y al dormir durante el día no tienen demasiado contacto con nosotros.
Al contrario de los hámsters, los jerbos raramente muerden, y no son tan asustadizos.
jerbo

Los hámsters suelen ser bastante agresivos entre sí, e incluso es bastante habitual que los padres se coman a sus crías.
En cambio los jerbos, son padres dedicados, tanto el macho como la hembra, y al regirse por el concepto de "clan", es lógico que varios de ellos convivan sin problemas en el mismo hábitat.
Nunca debes introducir uno o más jerbos en un clan ya establecido ya que son muy territoriales y atacan a cualquier otro que no forme parte de su clan. 

Alojamiento:

 

Los jerbos parecen estar mejor en jaulas con suelos sólidos. Una superficie de suelo de unos 25 x 50 cm. o de 40 x 40 cm. parece ser adecuada para una pareja más una camada de cachorrillos. La jaula normal de tamaño grande para nosotros los hamsters, la jaula para animales pequeños, el acuario de 40 litros e incluso algunas grandes jaulas para pájaros, como los que se venden en las tiendas de animales, pueden resultar adecuadas.

 

Para permitir que el jerbo pueda comer o beber como acostumbra, es decir, sentado, y para dejar algo de espacio para estirarse, es conveniente que la altura de la jaula sea de unos 20 a 25 cm.

Cada tipo de jaula tiene sus ventajas y sus inconvenientes en cuanto a durabilidad, higiene, peso y seguridad. Se prefiere las jaulas de metal, plástico y vidrio por la facilidad de limpieza. La madera es más barata, pero también es menos duradera y más difícil de mantener en condiciones higiénicas. (Los jerbos pueden roer las superficies de madera no protegidas, y pueden arañar en cierta medida las superficies de plástico y de madera).

Normalmente tus jerbos no saltarán hasta una altura suficiente como para escapar de un acuario o de una jaula abierta por la parte superior, pero conviene que haya algún tipo de techo o de tapa para evitar la entrada de intrusos permitiendo, al mismo tiempo, la ventilación. Estas cubiertas pueden hacerse con rejilla de alambre, o pueden comprarse en tamaños estándar en las tiendas de animales.

El espacio entre los barrotes de la jaula o el tamaño de las aberturas de la rejilla debería de ser como máximo de unos 15 mm; así evitarás que se produzcan heridas en las narices de los jerbos durante sus intentos de roer el metal. No debe usarse malla contra insectos en ningún lugar que quede al alcance de los jerbos, ya que éstos pueden abrirse paso a través de ella con las uñas o con los dientes.

 

Es preferible que los costados de la jaula sean sólidos hasta una altura de varios centímetros por encima del suelo para evitar en cierta medida que los animales esparzan el material del lecho (lo que puede ocurrir cuando los animales se entierran en él). Así también puede evitarse la pérdida accidental de jerbos recién nacidos a través de las aberturas de los barrotes o de la rejilla, y además se proporciona cierta protección contra las corrientes de aire.

El material para el lecho ha de ponerse sobre el suelo de la jaula hasta formar un estrato de unos 5 a 8 cm. Los jerbos lo arreglarán de modo que quede conforme a sus necesidades, según la temperatura y sus propios gustos.

 

Este material debería ser limpio, absorbente, desprovisto de polvo o incapaz de generarlo, y atóxico. Las virutas de madera de pino, el serrín grueso, las mazorcas de maíz trituradas, la hierba, las hojas o cualquier material comercial para lechos son adecuados.


TEMPERATURA Y HUMEDAD

En su entorno natural, los jerbos pueden ponerse cómodos retirándose a sus madrigueras subterráneas durante el calor del día o el frío de la noche, de ser necesario. En cautividad, sus necesidades son aproximadamente las mismas que las tuyas, -unos 22,5 a 26,5 Cº y de un 40% a 60% de humedad relativa-. Pueden tolerar temperaturas más bajas, hasta de unos 10 Cº si tienen suficiente cantidad de material de lecho y para anidar.

Si el clima lo permite, puedes poner las jaulas de los jerbos al aire libre, a condición de que estén protegidos de la lluvia, del sol, del viento y de los depredadores.

 

Los jerbos que viven en un acuario o en jaulas de plástico transparentes han de ser protegidos contra la exposición directa a la luz solar. Los rayos de sol, más las propiedades aislantes y posiblemente el efecto de aumento de las paredes de la jaula, pueden hacer subir la temperatura interior a más de 38 Cº, lo que podría ser fatal para los jerbos.

 

La jaula puede situarse en un subterráneo, garaje, o habitación desocupada, como prefieras. Debido a la limpieza y carencia de olor de los jerbos, generalmente no hay ninguna razón para que tengas que privarte de tenerlos casi en cualquier habitación de tu casa.

Los jerbos son muy activos y necesitan un medio ambiente entretenido. Hay miles de maneras de proporcionarles diversión.

En las tiendas de mascotas o veterinarias se pueden encontrar juguetes de madera con forma de porciones de queso, o cofres, etc., que sirven también para que desgasten sus dientes.

Además los jerbos adoran el cartón (sobretodo los tubos), o rollos vacíos de papel higienico o toallas de papel, en los que les encanta esconderse hasta que los roen por completo...
cajas de cartontubos de carton

ruedita preparadaruedita sin preparar A algunos jerbos les gusta usar las ruedas que generalmente se usan para otros pequeños roedores. Sin embargo, tenes que cubrir la parte externa con cinta de papel (cinta de pintor o de enmascarar) gruesa (nada que contenga hilos o tejidos). También cubrí el interior de la rueda con cinta ó con el material que uses para la cama o nido para evitar que las patas del jerbo se peguen a la cinta.

Igualmente populares, son las ruedas de plástico o acrílico. Estas, al ser cerradas, permiten meter al jerbo en su interior sin posibilidad de que escape, lo que hace posible dejar la rueda sobre en el piso para que el jerbo recorra, con ella, la casa.
De todas maneras, no hay que excederse en el tiempo que dejamos a nuestros jerbos dentro de estas bolas, ya que al no poder salir, no puede elegir cuándo quiere dejar de ejercitarse.
ruedas de acrílico



Comportamiento:

Los jerbos son animalitos extremadamente curiosos.

 

Ante el menor ruido o juguete nuevo que les pongas en la pecera, no podrán resistir la tentación de dejar lo que estaban haciendo para ir a ver qué hay de nuevo.

Los jerbos sienten una particular predilección por excavar casi compulsivamente en las esquinas de la pecera. También vas a notar que, cada vez que limpies la pecera, se van a pasar un buen rato excavando (e incluso rascando las paredes de la pecera) y moviendo las cosas de un lugar a otro hasta que les parezca que ya hicieron todos los arreglos necesarios. Si les pones papel sanitario o tissue, o pañuelos de papel para que se hagan el nido, lo van a desmenuzar hasta convertirlo en pedacitos, y harán con ellos fabulosos iglúes de papel.

  Los jerbos, como todo roedor, necesitan roer no sólo por diversión sino para desgastar sus dientes que crecen continuamente. Si bien roen cualquier cosa, lo ideal para que mantengan sus dientes de un largo adecuado, son los troncos de madera y los cubos de alfalfa.

 

Cuando elijas madera para ellos, asegurate de que no esté tratada con pesticidas, tinturas o cualquier otro material que pueda resultar tóxico. Tampoco se recomienda el plástico o los elementos de PVC.

 

El acicalamiento forma parte de las actividades diarias de los jerbos. Se lavan, peinan y acicalan varias veces al día, e incluso les encanta turnarse para peinarse unos a otros. Generalmente utilizan el líquido que segrega su "Glándula de Olor" (ubicada en el centro de la panza).

 

A algunos jerbos les encanta "bañarse" en arena, tal como hacen los pajaritos en la tierra seca.
No a todos les gusta, así que no te desesperes si, a pesar de tus esfuerzos, solamente usan el recipiente que les pongas para excavar. Nosotros usamos arena y también polenta (harina de maíz). Otra alternativa es utilizar el polvo o talco para baño de chinchilla que se vende en algunos pet-shops. Es más caro, pero les da un brillo increíble al pelo.


Uno de los comportamientos más característicos de los jerbos es el tamborileo que realizan con las patas traseras. Generalmente, éste "zapateo" es realizado con dos funciones totalmente diferenciadas entre sí:

En el primer caso, los machos lo usan como parte del cortejo nupcial, antes de aparearse con las hembras; pero también se utiliza como forma de "comunicación" o de alertar a los otros, si escuchan algún ruido extraño. En algunos casos en los que se nos escaparon jerbos, fue fácil ubicar donde estaban ya que al imitar el sonido del "zapateo" ellos nos contestaban.

Reprodución:

 

Los jerbos tienen la primer cría en el término de entre 21 a 25 días aproximadamente, y se aparean nuevamente la misma noche en que la hembra pare las crías.

Esto significa que en el término de unos 35 a 45 días más aproximadamente, la hembra estará lista para destetar a los cachorros y recibir a la nueva camada. Decimos "aproximadamente" porque sabemos que la hembra puede demorar el implante de los óvulos  en el útero, demorando así también la parición.

El cortejo es muy peculiar: el macho llama a la hembra zapateando o tamborileando con sus patas traseras, y se aparean repetidamente, por periodos muy breves, más o menos por el término de unas horas y generalmente en la tarde o la noche.
Las hembras alcanzan su madurez sexual entre las 8 a 12 semanas, y es más común que se aparee más pronto si el macho es un poco mayor que ella, que siendo ambos jóvenes. La hembra puede entrar en celo cada 4 ó 6 días, durando unas 24 horas, aproximadamente.


Alrededor del día 18 de gestación la hembra presentará unas protuberancias a ambos costados, y la característica forma de "pera".

 

Es importante que las hembras tengan abundante agua y una dieta un poco más alta en proteínas que lo habitual, ya que si la hembra es mal alimentada durante la gestación, los cachorros nacerán chiquitos y con mayor predisposición a enfermedades.    

 

Los jerbos (incluso los machos) son padres muy dedicados. El macho y la hembra suelen turnarse en la tarea de mantener el nido y las crías aseadas, excepto en las primeras 24 a 48 hs. después del parto, en que el macho suele mudarse momentáneamente a otra esquina del hábitat, encargándose solamente la madre de cuidar a las crías.

Las crías nacen sin pelo, ciegas, y completamente indefensas, pero su desarrollo es bastante rápido. Generalmente las camadas suelen tener de 4 a 6 cachorros pero puede haber camadas incluso de hasta 9 ó 10 jerbos.

 

A los 3 ó 4 días ya se puede distinguir una pelusita que irá dando paso al pelo definitivo.

Entre la semana de vida y los 10 días, ya suelen tener el pelo definitivo, y además suelen escaparse del nido a inspeccionar los rincones de la pecera (por eso es muy común ver a los flamantes padres ir corriendo a buscar a sus hijos y llevarlos nuevamente a la seguridad del nido...).
Alrededor de los días 15 a 21 los ojos de las crías comenzarán a abrirse, aunque algunos podrían tardar un poco más, y más o menos para la misma época o un poco antes, las orejitas se despegaran y empezarán a parecerse más a unos "jerbos en miniatura" .      

 

Más o menos a las 3 semanas de vida los jerbitos empezarán a mordisquear alimentos sólidos, aunque aún seguirán amamantándose de su mamá. En éste período, justo después de que abren los ojos hay que tener especial cuidado al manipularlos ya que son particularmente inquietos y saltarines.

 

No es recomendable separarlos de sus padres antes de las 6 semanas ya que de lo contrario, los cachorros no tendrán el tiempo suficiente para imitar a sus padres (a usar el bebedero sobre todo), y adquirir las conductas sociales propias de su clan, así como también de acostumbrarse al trato con humanos.

Lamentablemente en nuestro país hay muchísimos criadores sin escrupulosos que destetan a los jerbos al mes cumplido.

 

Es por ello, que la mayoría de jerbos que vemos en los tiendas de animales o Veterinarias suelen ser ariscos y desconfiados. Sin mencionar que siendo tempranamente destetados pueden ser más propensos a ciertas enfermedades

    Nunca una hembra debería tener más de 2 ó 3 camadas seguidas (sobre todo si es de tener camadas muy numerosas), ya que esto implica un desgaste físico muy grande para la hembra y se corre el riesgo de que le falten nutrientes para alimentar a los futuros cachorritos; además de que los cachorros nacerán más débiles y es más factible que se enfermen.
Si te interesa la salud de tus jerbos y eres un criador responsable, tendrás en cuenta este factor, pues cuanto mayor es el desgaste físico de la hembra, menos expectativa de vida puede llegar a tener.

 
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  Pequeños mamiferos.
Hola, bienvenidos a una pagina web donde compartir experiencias, aprender y buscar solución a los problemas y dudas que tengais sobre vuestras mascotas.En este apartado se trataran pequeños mamiferos como conejos, chinchillas, cobayas, degus, hamster, ratas, jerbos, ratones, etc...
  Anfibios y reptiles.
Hace poco compre un Cynops Orientalis, unos tritones vientre de fuego japoneses, y la verdad es que gracias a ellos me he empezado a interesar por estos animalillos.
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